lunes, abril 7, 2025
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FMI, un instrumento de dominación

Por Mirta Botzman.

Cómo todos sabemos, o al menos deberíamos saber es imposible tener un acuerdo bueno con el FMI, por mejor negociador que sea el de un país deudor y vulnerable y más teniendo en cuenta que ya ni siquiera se intenta disimular o cuidar las formas de que se trata de un instrumento de dominación del capital financiero internacional y de los países de las economías centrales. Los técnicos con los que discute el ministro y equipo, son liberales ortodoxos con ideología marcadamente de derecha y obviamente contrarios a cualquier gobierno que intente implementar políticas que contemplen la situación socio económica de los sectores de menores ingresos o aquellos que directamente quedaron fuera del mercado por la implementación precisamente de las políticas que recomiendan esos mismos técnicos quienes cuando se sensibilizan hablan de los efectos no deseados de las políticas que exigen.

Diría que sobran los dedos de una mano para contar técnicos con otro esquema intelectual e ideológico y en general esos duran poco tiempo dentro del staff técnico. El Directorio está integrado por los representantes directos de los países miembros, pero no todos valen lo mismo. Cada uno de acuerdo al tamaño de su país y el aporte que realiza a la institución que hace mucho tiempo dejó de cumplir las funciones y objetivo para el que en teoría fue creado.

Estados Unidos es el único país que tiene poder de veto dado que posee más del 15% de las cuotas totales, mientras que nuestro país tiene el 0,67% del total de 190 países que son miembros del FMI. Massa y su equipo batallaron duramente durante más de cuatro meses y si bien para el propio FMI es un problema grande que Argentina entre en default con el organismo, evidentemente prefieren seguir tirando la soga que aprieta el cuello del país a sabiendas que el ministro candidato no se puede permitir una corrida cambiaria que vuelva a impulsar la inflación que podría acabar en una nueva hiperinflación y obviamente anular sus posibilidades electorales, que sería casi lo de menos.

También me parece que no está demás repetir que todo lo que se está discutiendo y tratando de negociar con el FMI es el Acuerdo firmado por Macri durante la presidencia de Trump. Después de tan dura negociación y como en toda negociación se termina con buenas y malas noticias. En relación a las malas, debemos recordar que obviamente se pueden transgredir y después pedir perdón. Nunca debemos olvidar la vieja y sabia frase que dice que si debes 100 es un problema tuyo pero si debes el 40% del capital del acreedor entonces el problema lo tiene el acreedor. En definitiva es un tema de decisión política.

En el texto publicado por el propio FMI confirmó que alcanzó un nuevo acuerdo con Argentina que contempla desembolsos por US$7.500 millones. Se espera que la próxima revisión tenga lugar en noviembre, explicó la entidad. Esto quiere decir que Massa logró sacarse de encima los ojos y narices del FMI hasta que terminen las elecciones y esto es muy bueno porque debemos recordar el rol jugado por la institución en la desestabilización y salida anticipada del gobierno de Alfonsín e inclusive el de De La Rua en dupla con Cavallo y su convertibilidad.

Mientras se cumpla con las metas fiscales, de reservas y de asistencia al Tesoro, antes de terminar el año Argentina podría acceder a los US$2.500 millones restantes. Los vencimientos del país entre julio y octubre suman U$S 7000 millones que deben pagarse antes del30 de octubre. Como el Directorio no perdona las vacaciones del norte pero especialmente no olvida que estamos en un proceso electoral cuya primer posta es el 13 de agosto en el que podrán analizar cómo quedó parado para la disputa electoral de octubre el ministro candidato, los  desembolsos, serán recién el 21 de agosto, poniendo al ministro de Economía a pasar la gorra el fin de semana pasada para realizar los pagos al organismo el lunes 31 de julio pasado a través de créditos puente de otros organismos multilaterales como la CAF y recurriendo nuevamente a los yuanes autorizados por el banco central chino. Como dijimos hace un tiempo, seguro vamos a recordar a este ministro de economía, entre otras cosas cómo un artista en hacer pases de magia en conseguir fondos para tapar agujeros y evitar una brusca devaluación.

El Fondo explicitalas exigencias al Ejecutivo en relación a:

-Contener el crecimiento de la masa salarial

-Actualizar las tarifas de energía,

-Fortalecer los controles de gasto a través de una asistencia social mejor focalizada y una mayor racionalización de las transferencias corrientes a las provincias y empresas estatales. En definitiva dicen mayor ajuste en programas sociales, transferencia a provincias y empresas del Estado, nada de mejoras en la distribución del ingreso vía suma fija o aumentos extraordinarias de salarios y quitar subsidios a las tarifas, esto último claramente inflacionario y que deteriora aún más el poder adquisitivo de los salarios. También tenemos que destacar que el Fondo retrocedió en su exigencia de una fuerte devaluación y, por lo tanto, el impacto inflacionario de lo acordado debería ser más acotado. En realidad el ajuste de precios posterior a que se diera a conocer los términos acordados tiene que ver con las prácticas abusivas usuales del poder económico argentino y no con el texto acordado. Es probable que los mayores impuestos sobre las exportaciones de maíz a mediano o largo plazo influyan en los precios de carne vacuna, pollos y cerdos por su incidencia en la alimentación animal, pero claramente no al día siguiente.

Por otro lado elogió la aplicación del impuesto PAÍS a las importaciones de bienes y servicios y la mejora del dólar agro como políticas de ingresos positivas para el equilibrio fiscal. De alguna manera terminó registrando el desastroso efecto de la sequía que debemos decir no sólo afecto las reservas sino también los ingresos fiscales porque no se pudieron cobrar las retenciones relacionadas con esas exportaciones. Hay dos ítems que me parece importante resaltar porque habla con claridad sobre la dureza de los negociadores argentinos que ojala hubiera tenido Guzmán.

El FMI recortó fuertemente la meta de reservas netas fijada con anterioridad, para fin de año en US$ 8000 millones y la flexibilizó a US$1000 millones. El otro punto importante es que el organismo exigía disminuir el porcentaje de déficit fiscal de 1,9% a 1,5% del PBI y el equipo económico logró que se mantuviera en 1,9% que parece nimio pero es mucha plata sobre todo en momentos de escasez.

También el organismo acusa recibo de la finalización de la primera parte del gaseoducto Presidente Néstor Kirchner, que antes se opuso a su construcción, señalando que gracias al mismo se esperan mejoras en el balance energético.

Siguiendo con una de sus máximas contraria a la emisión y apoyo por parte del Banco Central al funcionamiento del gobierno, el Fondo estableció que el BCRA no podrá continuar realizando lo que se llama Adelantos Transitorios al Tesoro.

Con este acuerdo Massa logra así despejar transitoriamente el horizonte cercano de las amenazas desestabilizadoras de una crisis política en las negociaciones en el frente externo y, con eso, desarma una de las tantas formas de creación de expectativas catastróficas, a las que una parte de la sociedad parece adicta. Ahora tendrá que enfrentar con mucha estrictez las presiones inflacionarias y el bajísimo poder adquisitivo de los salarios en una vasta franja de la población de nuestro país, precisamente la franja que históricamente vota mayoritariamente al peronismo. Ya sabemos que los responsables de la inflación son los sectores concentrados de nuestro propio país que usualmente suelen ser más derechosos y feroces que el propio FMI y sus técnicos, por lo que no podrá aflojar frente a ellos si quiere tener alguna chance de ser elegido como el próximo presidente.

Hablando de elecciones, la oposición y en particular Patricia Bullrich que parece menos coucheada o hace menos caso a las indicaciones de sus publicistas y asesores que Rodríguez Larreta, sino fueran tan dramáticas las consecuencias para el país de las cosas que dice en sus intervenciones parecen una sucesión infinita de escenas de Peter Capusoto.

Tanto ella como Rodríguez Larreta son maestros para desentenderse de que la situación actual es producto del gobierno de Macri del cual son corresponsables. Todos venimos hablando al menos desde enero que el Banco Central carece de reservas por la sequía, porque exportadores de soja y productores especulan con una devaluación y no liquidan sus reservas, porque los grandes empresarios nacionales y extranjeros siguen con su práctica de fugar divisas y ella hace no sé si una broma o se lo cree en serio y dice que va a entrar con una cámara a filmar al interior del Banco Central para “mostrar a corazón abierto a la sociedad la falta de divisas”. En lugar de mostrar su ignorancia los asesores económicos deberían darle ideas para que pueda expresar como haría si es presidenta para hacer crecer las reservas.

Obviamente ni cuando había muchas más reservas estás se encuentran en los pasillos del Banco Central, a lo sumo en la bóveda del mismo hay lingotes de oro (ni siquiera todos) y un poco de divisas como respaldo a los bancos comerciales por una eventual demanda de los clientes por sus depósitos de dólares.Sería bueno, en ese sentido, que la sociedad sea notificada sobre qué pasa con los 3.000 millones de dólares que empresas exportadoras no han ingresado a las reservas del Banco Central de la República Argentina, según informó el propio ministro de Economía. Es una acción ilegal de fuerte impacto económico, en un momento en que el país hace piruetas para conseguir dólares. Parece que poner en peligro nuestra estabilidad económica, debilitando las reservas monetarias, sale gratis, no es un tema público relevante y no constituye un delito contra los argentinos, pero tampoco es un tema de preocupación ni de Larreta, de Bullrich o Milei.

Estamos claramente en una situación de emergencia cambiaria donde no hay espacio para tanta frivolidad en el tratamiento del tema.

En realidad la campaña de los candidatos del PRO más que campaña electoral parece el guion de una película de terror. El economista Dante Sica, que fue ministro de Industria en el gobierno de Mauricio Macriy ahora asesoraaBullrich,aseguró que si gana las elecciones 2023,  Patricia Bullrich una de las primeras medidas a tomar es suspender los contratos colectivos de todas las actividades para marcar un punto de partida para que todos los convenios colectivos vuelvan “con condiciones modernas”.

En otro de sus discursos, sostuvo hace unos días su intención de recurrir a un “blindaje” de dólares a efectos de salir en forma inmediata del denominado cepo (sistema de administración de demanda de divisas). Para los muy jóvenes o los desmemoriados, recordemos que el “blindaje” negociado en noviembre de 2001 por el gobierno de De la Rua del cual era ministra, no fue otra cosa que un préstamo otorgado por el FMI, otros organismos de crédito internacional y entidades financieras locales, con el objeto de asegurar el pago de los vencimientos de capital e intereses de la deuda externa. La llegada efectiva de divisas fue más pequeña que lo acordado porque rápidamente el FMI optó por detener los desembolsos ante la certeza de la incapacidad de la Argentina para cumplir con los condicionamientos atados a los mismos y por tanto hacer frente a los compromisos asumidos, cosa que claramente no hicieron con Macri. Ello generó la crisis de finales de 2001, el fin de la convertibilidad, la apropiación de los bancos de los ahorros de los argentinos, la huida en helicóptero de De la Rua la feroz represión con un saldo de 39 muertos y el default de la deuda.

Tenemos que tener claro que propuestas como la de “dolarizar” la economía que plantea hoy Javier Milei, o la de “terminar con el cepo y abrirlo lo antes posible” con un supuesto “blindaje” del FMI de Patricia Bullrich, carecen de sustento o consideración alguna sobre el grado de desarticulación económica y social que provocarían. Ante la reacción masiva a los dichos de Bullrich, Rodríguez Larreta comenzó a guardar silencio sobre el denominado cepo.

Para no hacer demasiada larga esta, una última perlita de Bullrich es que frente a empresarios que como siempre lloraban por mas subsidios y flexibilidad laboral y disminución de los salarios, señaló que si es presidenta desde el primer día eliminara los planes sociales dará un seguro de desempleo por 6 meses y para el que no acepte los pondrá dentro de un sistema de “servicio civil obligatorio”, vinculada a la Gendarmería, fuerza con la que tiene muy buena relación desde antes dela desaparición y muerte de Santiago Maldonado. Por supuesto no se privan de amenazar de criminalizar a los jóvenes planteando la baja de la edad de la imputabilidad frente a delitos penales. Claramente existen estos delitos y es un problema pero la solución no es construir cárceles para jóvenes de 15 y 16 años sino implementar políticas integrales de inclusión y protección de los jóvenes desde un punto de vista diferente a la del código penal.

Visiblemente como señaló Cristina, este gobierno con todas las críticas que se le pueden realizar es infinitamente mejor que cualquier iniciativa de la derecha y sin dudar el gobierno que surja de Unión por la Patria también lo será con la ventaja adicional que habrá aprendido de los errores de la actual gestión. El otro tema que me parece relevante para terminar es que hay que hacer esfuerzos para que toda la población vaya a votar, al sistema democrático debemos fortalecerlo entre todos, la derecha se encarga de debilitarlo.

Mirta Botzman

La economista Mirta Botzman nos propone una mirada nacional, popular y democrática de la economía nacional e internacional, todos los jueves, a las 7,30, en su columna Cuentas Claras en el programa Contala como quieras, en La 99.3.

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