Farmacéuticos de Posadas revelaron un notorio aumento de las ventas de Ivermectina, droga autorizada por el Ministerio de Salud Pública de Misiones para ser suministrada a personas infectadas con el Sars-Cov-2, y aunque su expendio sólo está permitido bajo prescripción médica el dato genera alarma por el posible uso indiscriminado del antiparasitario.
Ante un fenómeno que ya se había producido en otras provincias argentinas, como San Juan, Córdoba y Río Negro, la Sociedad Argentina de Infectología (Sadi) reiteró en un comunicado su recomendación para que “no se utilice la Ivermectina para el tratamiento y/o profilaxis del SARS-CoV2 al margen de estudios bien diseñados, debidamente registrados, y que sean éticamente aceptables”.
Por Resolución Nº 003, con fecha 4 de enero, firmada por el doctor Oscar Francisco Alarcón, la cartera sanitaria provincial anunció la implementación de “uso terapéutico de Ivermectina en pacientes afectados con Covid-19, el cual deberá ser suministrado en dosis de 0,6 mg/Kg/día, una vez por día, durante cinco días”.
Incluso, en declaraciones a la prensa el ministro explicó que al ser Misiones “una provincia donde históricamente tenemos dengue, también va a ser aplicado teniendo en cuenta esto”.
El fármaco ha sido esencialmente utilizado en tratamientos contra parásitos en mascotas y otros animales, por lo que su stock se encuentra mayoritariamente en poder de las veterinarias y es menor en el caso de las farmacias.
“La evidencia científica en curso que evalúa el uso de Ivermectina sola o combinada con otras drogas para la prevención y/o tratamiento de la infección por SARS-Cov2 es de muy baja calidad y no ha reportado datos claros de eficacia clínica”, dijo en su comunicado la Sadi.
“Siguiendo los lineamientos de ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), la utilización de una medicación en carácter de uso compasivo sólo se encuentra autorizada para pacientes debidamente identificados, lo que excluiría la utilización de la Ivermectina en forma masiva como actualmente se pretende”, señaló el colegiado de infectólogos, por lo que recomendó no utilizarlo “para el tratamiento y/o profilaxis del SARS-CoV2 al margen de estudios bien diseñados, debidamente registrados, y que sean éticamente aceptables”.
El comunicado ratificó la postura que la Sadi ya había expresado en octubre pasado, cuando advirtió que “la evidencia disponible in vitro sugiere que para alcanzar niveles efectivos de ivermectina se necesitarían importantes aumentos, potencialmente tóxicos, de la dosis”.
“Incluso dosis de hasta 10 veces mayores que las aprobadas no alcanzarían las concentraciones efectivas in vitro contra el SARS-CoV-2”, se había especificado.
“La Ivermectina no es una droga inocua y aun a dosis terapéuticas puede provocar un número frecuente (>10%) y considerable de efectos secundarios adversos, desde leves a graves”, advirtieron los infectólogos hace tres meses.
También en octubre pasado el Colegio Veterinario de la provincia de Río Negro había prevenido que “para el caso de la Ivermectina, droga con múltiples usos en sanidad animal y también en medicina humana, se esperan resultados satisfactorios, no sin antes poder contar con la aprobación, para su uso, de la ANMAT. De todas formas, aprobado el mismo, su correcta utilización será siempre bajo el criterio médico y en la formulación adecuada para su uso en personas.