«La principal hipótesis apunta a un ataque británico»
La Red Federal de Investigación ARA San Juan, principal impulsora del esclarecimiento sobre lo ocurrido con el submarino de la Armada Argentina desaparecido hace más de cuatro meses, concluyó que “la principal hipótesis es la de un ataque británico y no un accidente”.
Mariano Pi, coordinador de la Red, que además de familiares de los tripulantes del submarino reúne a expertos navales y de otras áreas relacionadas con la investigación de incidentes marinos, le aseguró al programa “Contala como quieras” que ”no hay ningún indicio que asocie una falla interna con una explosión” como la que –según la información oficial- habría provocado el hundimiento de la nave.
“Nuestra investigación está apoyada exclusivamente en información oficial”, aclaró Pi, y destacó que la organización buscó primordialmente chequear “todas las posibilidades de que se tratara de una explosión o implosión por problemas propios del submarino”, pero que las últimas comunicaciones de la nave no arrojan ningún indicio en tal sentido.
En cambio, la investigación de la Red encontró que la explosión detectada por la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBTO, el organismo internacional con sede en Austria que brindó el dato sobre el que se apoya toda la información oficial sobre el destino del ARA San Juan) “es perfectamente compatible con la detonación de un misil MK 54 (torpedo para guerra antisubmarina de fabricación estadounidense)”, reveló Pi.
“Para la fecha de la explosión (15 de noviembre) estaba destacado en Malvinas el destructor británico HMS Clyde. En la orden de vigilancia que tenía el ARA San Juan (revelada por el portal Infobae, y que después fue confirmada en la presentación que el jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, hizo ante la Cámara de Diputados de la Nación) figura entre los objetivos este buque de la Marina británica, que transporta helicópteros antisubmarinos Merlin, equipados con tres misiles MK 11, compatibles en el rango explosivo con el MK 54”.
“La explosión del ARA San Juan es compatible con la explosión de un misil MK 54, y el submarino tenía orden de vigilancia sobre el único sistema de armas en todo el Atlántico Sur que dispara torpedos MK”, aseguró el experto.
“Desde que se dio a conocer la información de la explosión exigimos que el Gobierno nos dé la equivalencia en TNT (unidad de medida de las explosiones) de la explosión del 15 de noviembre. Después nos enteramos de que el 1° de diciembre la Armada Argentina y la CTBTO lo que en realidad detonaron al hacer la prueba de compatibilidad fue un MK 54. Está dicho en la presentación por escrito de Marcos Peña: compararon la explosión en el ARA San Juan con un torpedo”, enfatizó Pi.
En cuanto a las fallas internas del submarino de las que dan cuenta los partes de comunicación de la nave, el coordinador de la Red señaló que “la navegación a circuito dividido (con la mitad de las baterías) es relativamente común en submarinos diésel eléctricos”, y que ése no pudo ser el desencadenante de la explosión.
“La última comunicación dice que el submarino estuvo horas haciendo snorkel (navegación a 18 metros de la superficie), es decir liberando gases (dióxido de carbono, hidrógeno) y renovando el aire de la nave. Esto quiere decir que no había concentración de hidrógeno, que podría generar la explosión. Los niveles de hidrógeno, dióxido de carbono y oxígeno tienen sensores, y son seguidos minuto a minuto: no hubo ningún alerta de los sistemas de detección de la composición de gases dentro de la atmósfera del submarino. No hay ningún indicio que asocie una falla interna con una explosión”, afirmó Pi.
En el audio que acompaña esta nota, la entrevista completa con el coordinador de la Red Federal de Investigación ARA San Juan: