Juan Carlos Cruz, James Hamilton y José Andrés Murillo agradecieron al sumo pontífice sus palabras de apoyo y de perdón, al tiempo que le solicitaron emprender acciones contra este tipo de crímenes.
«Pedimos al papa que no le tiemble la mano para castigarlos, no por haber cometido un pecado sino por haber cometido un crimen, un crimen contra la sociedad«, dijeron mediante un comunicado tras su visita al Vaticano.
Asimismo, esperan que se abra un caso legal contra Karamadia y todos aquellos representantes religiosos, como el cardenal Javier Errázuriz, quien encubrió este tipo de crímenes contra menores por más de media década.
“Nos encantaría (un proceso) contra Errázuriz, lo mismo que contra (el cardenal Ricardo) Ezzati. Todos a la cárcel por encubrir”, agregó Hamilton.
Los tres jóvenes, quienes fueron abusados por el padre Karamadia cuando eran menores de edad, fueron invitados al Vaticano por cuatro días por el papa Francisco, quien les ofreció perdón en nombre de la Iglesia universal.
«Pudimos conversar de manera respetuosa y franca con el papa. Abordamos temas difíciles como el abuso sexual, el abuso de poder y sobre todo el encubrimiento de los obispos chilenos», explicaron y agregaron que es deber de la Iglesia de reparar a todos los jóvenes y niños abusados.
“Personas que confiaron y que fueron traicionados en su fe y en su confianza (…) la Iglesia tiene el deber de transformarse en aliada y guía del mundo respecto de la lucha contra el abuso», concluyeron.